El pasado 5 de junio, día mundial del Medio Ambiente, la delegación para el Cuidado de la Creación volvió a convocar una realización del Camino de los Montes de Toledo hacia Guadalupe. Se trataba de la séptima etapa.
En esta ocasión, los peregrinos se servían del lema de la efeméride mundial, “Restaurar los ecositemas” y lo unían al lema de esta etapa: “Restaurar y sanar los corazones en el hogar de María”.
Junto a las miembros que conforman el equipo de trabajo de la citada delegación, se unía el párroco de Recas, D. Ricardo Soto.
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— cuidadodelacreacion (@CuidadoDLCreac) June 5, 2021
Un total de 19 kilómetros a través del monte
El trayecto se desarrollaba desde Espinoso del Rey hasta Robledo del Mazo; un total de 19 kilómetros que duró cinco horas a pie.
Esta etapa daba comienzo en la iglesia parroquial de Espinoso del Rey con el rezo de laudes. Tras llevar a cabo la oración del peregrino y tomar el bastón, depositado en el templo, se iniciaba la marcha a través del monte con repoblaciones de pino pinaster y manchas naturales mixtas de quercineas. “Los peregrinos pudieron disfrutar de la vegetación típica mediterránea, con zonas extensas de jarales que colonizan superficies que han quedado rasas por incendios o roturaciones”. Así lo explica el delegado para el Cuidado de la Creación, Javier Gómez-Elvira.
La pausa fue aprovechada para almorzar, rezar el ángelus y el rosario. Posteriormente y tras cruzar el río Gévalo, los peregrinos llegaban a Robledo del Mazo, donde el párroco, D. Antonio Gil acogía a los peregrinos en la iglesia parroquial. Allí se tuvo una oración final ante el Santísimo Sacramento y el canto de la Salve.
